viernes, 20 de julio de 2007

CODIGO DE HONOR

Nada mas honroso en la vida que seguir el codigo BUSHIDO (el camino del guerrero), tras pasar una larga temporada en Japón perfeccionando mis aptitudes en el arte de la espada y en el aikido. Decidi aprender mas del Japón tradicional, me enfunde en una armadura que perteneció a Kazuo Shinko, Jefe del Daimyo de Endo en Osaka y adentrarme en las profundidades de este maravilloso y tradicional pais. Alli conocí a mi maestro y forjador de espadas Yoshindo Yoshihara, el cual tras diez años de enseñanaza hizo de mi un perfecto armero y conocedor de toda esta basta cultura.

La última aparición del samurai fue en 1867 cuando los samurais de las provincias de Choshu y Satsuma derrotaron a las fuerzas del shogunato a favor del gobierno del emperador con la Guerra Boshin (1868-1869). Las dos provincias eran las tierras del daimyo que se rindió a Ieyasu después de la Batalla de Sekigahara (1600).
Otras fuentes afirman que el último conflicto de samurai era en 1877, durante la Rebelión de Satsuma en la Batalla de Shiroyama. Este conflicto tenía su génesis en el levantamiento anterior para derrotar al shogunado
Tokugawa, conduciendo a la Restauración Meiji.
El gobierno recién formado instituyó cambios radicales, apuntados a reducir el poder de las esferas feudales, incluso la Satsuma, y la disolución del estado samurai. Esto condujo al levantamiento liderado por
Saigo Takamori.
El emperador Meiji abolió el derecho del samurai de ser la única fuerza armada a favor de un ejército más moderno y de estilo occidental. El samurai se hizo Shizoku (士族) quién retuvo algunos de sus sueldos, pero el derecho de llevar puesta una katana en público fue abolido finalmente junto con el derecho de reducir a plebeyos que les faltaron el respeto. El samurai finalmente llegó a su fin después de cientos de años de goce de su estado, sus poderes, y su capacidad de formar el gobierno de Japón. Sin embargo, la regla del estado por la clase militar no estaba todavía terminada.

lunes, 16 de julio de 2007

ASTERIX, UDERZO Y FARGO



Quien me iba a decir, que esos comics que tanto me atrapaban de pequeños iban a formar parte de mi trabajo de mayor.
El verano pasado me tuve que desplazar a Paris por que habíamos adquirido la licencia de Asterix para hacer las figuras. Cual fue mi sorpresa cuando sentado en la sala de Espera aparece el señor Uderzo con su traje impoluto, su secretaria y el adjunto con el que yo tenía la cita.
Para mi esto fue un impacto, ya que conocer a una leyenda viva del comic era lo máximo. Tomamos un cafe (malísimo porcierto) y hablamos de las figuras que habíamos hecho y que teníamos que hacer. Me gustó la breve pero intensa conversación.
Le quise convencer de hacer unas figuras de Javi "FARGO" vestido de Romano Altoimperial, en su versión mas edulcorada de la Asociación de Reconstrucciones históricas Altoimperiales la Mancheguita, pero denegó mi petición, aunque sonrió por la foto, le pareció un hit.